Una nueva alternativa al correo electrónico


        Me ha pedido el titular de esta página, Angel, que escribiera unas líneas para explicar el negocio que tengo actualmente, ya que parece ser, no recibe más que mensajes preguntando por el tema. Vamos allá.

        Cuando empezé con esto de LaCosa, es decir; Internet, ví al momento las enormes posibilidades del correo electrónico. Enviar un mensaje en cuestión de segundos al lugar más apartado del mundo. Y además, adjuntar un fichero gráfico, un memorándum, un fichero de sonido, un vídeo .... que sé yo que más cosas se pueden adjuntar.!!.

        Tener una correspondencia sostenida y a diario con cualquier persona y a un costo muy reducido, tal como estoy haciendo yo actualmente. Que estoy dando clases de bable a un monje tibetano y otra comunicación diaria con un párroco de una pequeña aldea gallega, sobre temas gastronómicos y alguna que otra vez sobre chorvas. Además; por San Pifonio, me confiesa a través del correo, cosa que al parecer es legal. Una vez recibida la confesión y si lo estima conveniente -que siempre lo estima así- me concede la absolución, una vez recibidos los cinco kilos de morcillas que me suele imponer como penitencia.

        Ya estoy divagando. :-((. Vamos a seguir con el tema. Pues bien; el correo electrónico es fantástico. Pero yo me dije : Chapó !! ... pero si quiero enviar a un colega una caja de farias .... o bien dos kilos de fabes ..... o una dentadura postiza .... o devolver un regalo, como por ejemplo un suspensorio .... ¿ puedo hacerlo a través de LaCosa?. Nooooo ..... rotundamente NO !!!!. Hasta que la Telefónica no aumente el grosor de los cables por donde transmiten la señal .... NO !!!!!!.

        Y alquien me dirá : Eso se puede enviar a través de las diferentes empresas de mensajería que hay. De acuerdo. El servicio no es precisamente barato, ni tampoco muy rápido. Y un día después de visitar todos los chigres de Gijón donde hay buena sidra -que hay bastantes-, y con media catrapocia me puse a cavilar. Y a eso de las cinco de la mañana, ciaca !!! me vino la gran idea. Me dije : Las palomas mensajeras fueron y son muy eficaces, pero sólo pueden transportar objetos de muy poco peso, como un pequeño cartucho con un microfilm o cosas así.


        Días atrás había estado en Carrea, en el concejo de Teverga y ví unas hermosísimas gallinas en un prao. Una de ellas; la más esbelta, era requerida por un enorme gallo que no dejaba de incordiarla. La gallina no estaba por la labor y de pronto inició un vuelo huyendo del galanteador y fué a parar a un maizal doscientos metros más abajo. Quedé muy sorprendido y después de darle muchas vueltas, pensé que si a este tipo de gallinas, robustas y de buen peso, se las pudiera adiestrar convenientemente, pasaríamos de la paloma mensajera a la gallina mensajera.

        Y me puse a la labor. Adquirí la gallina voladora a un respetable precio -actualmente se llama Romualda, y es la purasangre del criadero-, más otro lote de venticuatro. De estas, tuve que "suprimir" catorce. Digo "suprimir" a comérmelas junto con otros colegas, a la pepitoria, ya que después de dos semanas de intenso entrenamiento, consistente en ejercicios respiratorios, mucha gimnasia, y algo de pesas, no eran capaces de remontar el vuelo y la que lo hacía, este no sobrepasaba los quince o veinte metros.

        Las restantes, o sea once; después de muchos entrenamientos, horas, sinsabores, disgustos y discusiones de todo tipo -síiiii .... discusiones incluso con las gallinas, que en ocasiones barruntaba que pensaban que estaba loco- conseguí vuelos duraderos y portando pesos de hasta un kilo. Es decir; actualmente tengo seis gallinas -aparte la Romualda- que son capaces de portar cualquier objeto de un peso no superior a un kilo, desde el Cabo Peñas, a Puerto Ventana. Y desde El Eo hasta el Deva. Lo que es lo mismo : Asturias de Norte a Sur y de Este a Oeste.


        Y cosa aparte es la Romualda. Es algo fuera de serie. A los pocos días de adiestramiento, iba desde el Picu el Paisanu hasta el barrio de Pumarín, en Gijón -línea recta y descendente- en poco más de veinte minutos. Excepto aquellos días que volando sobre la vertical de Lugo de Llanera, avistaba un gallinero donde el regidor era un hermoso gallo, llamado El Moro y se lanzaba en picado hacia él, y allí se estaba haciendo que sé yo, un largo tiempo; sin tener en cuenta que yo estaba en el Picu, atareído de frío. Este problema lo tuve durante varios días, independientemente de que a la Romualda le faltaban fuerzas y atención en el trabajo. Y hasta que El Moro, no tuvo un accidente de tráfico -eso sí, provocado- no fuí capaz de hacer carrera con ella. También tuve muchos problemas con los patos del embalse de Veriña, que la acosaban de manera brutal. Logré al cabo de pocos días, terminar con buena parte de ellos. Me hice con un buen reclamo, y cuando bajaban como locos al mismo, con una repetidora los diezmaba.


        Solucionado el tema del galán, y después de que la Romualda, superase el gran disgusto que llevó cuando se enteró del percance, se aplicó de lo lindo y día tras día no deja de sorprenderme. No sólo hace los recorridos con prontitud y con pesos algo superiores al kilo, sino que hace las entregas personalmente al destinatario. No sé, ni tengo la menor idea que capacidad tiene, para saber que un envío que remito al Ayuntamiento de Cabrales, es precisamente para Loli, la telefonista. Llega a Arenas, entra por la ventana conveniente y deposita el mensaje en la mesa de Loli. Y si esta, -por un casual- tiene otro envío de retorno, entonces como la vuelta es de consideración, espera a que salga el ALSA, se pone encima de la baca del autocar y así viene hasta las proximidades donde tengo el criadero. Una vez en éste, da las instrucciones oportunas a otra gallina y esta hace la entrega. Verlo, para creerlo.


        En fín ...... no os doy más la paliza. De momento, sigo en números rojos, pero hay que persistir. Lo que tengo miedo es que cualquier día se entere el Vil Geis, y me desarme el chiringuito. Aquí como no hay programas informáticos, ni cables, ni placas base, ni nada de todo ese embrollo, no me ofrecerá un ochavo por el negocio. Simplemente dará la orden oportuna, un Pantom sobrevolará el criadero y con un simple misil se irá todo a tomar por el saco. Espero que el día que se produzca el percance, estar en el lagar del Chumberas, dàndole a unas cuántas botellas de sidra. Y si la chamusquina no es de consideración, por lo menos, -con harto dolor de corazón- poder comerme a La Romualda, junto con otros colegas. Pesa cerca de ocho kilos y tiene que dar un caldo fantástico y hacer una pepitoria magistral. Espero que no sea así ..... pero ya sabemos todos como se las gasta el Vil.

        Y si esto ocurre -que tarde o temprano ocurrirá- entonces intentaré adiestrar esos enormes pavos extremeños para hacer la misma labor que están haciendo actualmente las gallinas. Eso sí, los pavos convenientemente armados para replicar a cualquier agresión. Sea la de un Pantom, o simplemente a la de un guaje con un forcau. El que las da, las toma.

        Yo de brazos cruzados no voy a estar, dado como está el trabajo aquí en Asturias. Y si los pavos no dan la talla, entonces avestruces.


El Macario.febrero 1998
Desde un lugar de la montaña astur.
Mensaje a través de mi empresa.
Portadora : Paquita "La Ojeriza".